Empresa de telefonía afirma que ciberdelincuentes no tuvieron acceso a los registros de llamadas y SMS de los clientes
El gigante de la telefonía de los Estados Unidos, T-Mobile, ha manifestado hace unos días que los hackers maliciosos no han tenido acceso a las llamadas, mensajes de texto y de voz de sus clientes, durante un ciberataque en curso en toda la industria, dirigido a empresas de Internet y de telefonía.
En este contexto, el director de seguridad de la compañía telefónica ha señalado en un comunicado que T-Mobile detectó en las últimas semanas, algunos intentos de infiltrarse en los sistemas, los cuales, según el ejecutivo, se originaron en otra empresa de telecomunicaciones conectada a la red de T-Mobile. Cabe destacar que dicha compañía no ha sido nombrada.
Del mismo modo, se cortó la conectividad con la red del proveedor, ya que se creía que estaba y aún puede estar comprometida, según las palabras del director de seguridad.
Diversos medios digitales han informado que el grupo de ciberdelincuentes respaldado por China, llamado Salt Typhoon, ha comprometido a T-Mobile, junto con otros gigantes de la telefonía y telecomunicaciones, como AT&T, Verizon y Lumen.
Esto como parte de una amplia operación de espionaje dirigida a las comunicaciones de funcionarios estadounidenses de alto rango, incluidos políticos y excandidatos presidenciales.
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La compañía afectada ha explicado que no ha podido identificar con seguridad la identidad de los cibercriminales, pero ha agregado que no ven a estos ni a otros atacantes en sus sistemas en estos momentos.
Además, no ha descartado de forma explícita una intrusión previa en sus sistemas, manifestando que sus defensas de ciberseguridad han impedido que los hackers maliciosos accedieran a información confidencial de sus clientes.
Cuando medios digitales han preguntado sobre el incidente, los portavoces de T-Mobile señalaron que los metadatos sobre las llamadas telefónicas y los mensajes de texto de los clientes, así como la información acerca de la persona que llama, el remitente, destinatario, fechas y horas de las comunicaciones, se consideran registros confidenciales de los clientes y no se ha accedido a ellos.
La organización cuenta con medios técnicos sólidos, entre los que se incluyen registros, para poder identificar amenazas en sus sistemas. Ha sido este tipo de telemetría el que ha permitido identificar de forma rápida la actividad sospechosa y tomar medidas para proteger los sistemas propios y los clientes. Esto según palabras de los portavoces de T-Mobile.
Además, la empresa ha invertido en el fortalecimiento de la seguridad informática durante los años anteriores. En gran medida, debido a numerosas violaciones de datos que han comprometido la información personal de millones de sus clientes.
Asimismo, la agencia de seguridad estadounidense, CISA, y el FBI, han manifestado en una alerta pública que los actores maliciosos, respaldados por el Estado Chino están atacando a las empresas de telecomunicaciones como parte de una amplia y significativa campaña de espionaje.
Esta campaña de espionaje va dirigida a los sistemas de escuchas telefónicas que las empresas de telefonía e Internet de los Estados Unidos están obligadas por ley a instalar en sus sistemas.
