Llega un nuevo enfoque para la ciberseguridad estratégica llamado "Secure by default"
De acuerdo con especialistas en el tema, se espera que el gasto global en ciberseguridad alcance la cifra de 212 mil millones de dólares en el 2025, representando un incremento del 15% respecto al año anterior. Este notable crecimiento refleja la creciente preocupación de las empresas por protegerse frente a las amenazas digitales.
Sin embargo, en muchas organizaciones, la seguridad informática todavía se aborda de manera reactiva, relegada a etapas finales de los proyectos tecnológicos, lo que va dejando vulnerabilidades críticas. En este contexto, la irrupción de la inteligencia artificial surge como una herramienta clave para transformar la manera en la que las compañías detectan, previenen y mitigan los riesgos de ciberseguridad.
Para garantizar una protección efectiva, la ciberseguridad debe estar presente desde el inicio de cualquier proyecto tecnológico. Este principio, conocido como “security by default”, propone integrar medidas de seguridad en todas las fases de desarrollo, desde el diseño hasta la implementación y el mantenimiento.
Por medio de metodologías como Secure Software Development Lifecycle (SSDLC), se automatizan procesos basados en el enfoque DevSecOps, lo que permite identificar efectivamente riesgos desde las etapas iniciales y asegurar que los estándares de ciberseguridad se mantengan a lo largo del ciclo de vida del proyecto.
Asimismo, este enfoque fomenta una colaboración continua entre los equipos de desarrollo, operaciones y seguridad, asegurando que las aplicaciones y sistemas sean confiables desde el momento en el que son desplegados. A partir de allí, no solo se reduce la exposición a amenazas, también se optimizan recursos, mejorando la eficiencia operativa.
TIC Defense se pone a la vanguardia de la seguridad y protección de los sistemas empresariales, al ofrecerte un conjunto de herramientas y soluciones de alta tecnología. La ciberseguridad debe tomarse en serio debido a que los ciberdelincuentes no van a descansar hasta acceder a tu información sensible.
En este ámbito, la ciberseguridad no debe limitarse al ámbito técnico ni considerarse una tarea exclusiva del departamento de TI. Por el contrario, es importante adoptarla como un enfoque transversal, el cual involucre a todas las áreas de la organización, incluyendo los niveles estratégicos y de dirección.
Herramientas de IA como Copilot para Seguridad permiten generar informes detallados que los equipos de análisis pueden compartir con otros departamentos, fomentando así una cultura de concienciación y colaboración en torno a la seguridad.
Además, la integración de diversas herramientas de seguridad en una única plataforma centralizada facilita una gestión eficiente. Esta consolidación no solo optimiza los recursos disponibles y reduce costes, del mismo modo, permite una respuesta más rápida y efectiva ante posibles incidentes.
El uso de la inteligencia artificial en la seguridad informática está transformando radicalmente las capacidades de las compañías para detectar y prevenir ataques. Con su habilidad para analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, estas tecnologías pueden identificar patrones anómalos que podrían ser indicios de actividades maliciosas.
La IA también permite la automatización de tareas clave, como la gestión de parches y la monitorización de sistemas, liberando a los equipos de seguridad para que puedan concentrarse en amenazas y eventos más sofisticados. Este enfoque no solo mejora la detección temprana de riesgos, a su vez, fortalece la resiliencia operativa.